Toyota Motor perdió en 2016 el título de compañía que mayor número de vehículos comercializa en todo el mundo en favor del grupo alemán Volkswagen, la primera vez desde 2011 que el fabricante japonés cede el trono como mayor vendedor anual.
Según los datos publicados hoy por la empresa con sede en Aichi (centro de Japón), el grupo Toyota, que incluye a sus subsidiarias Daihatsu Motor y Hino Motors, vendió 10.175.000 de unidades en todo el año pasado.
La cifra es un 0,2 por ciento superior a la del año precedente, pero inferior a los 10.312.000 millones de unidades (un 3,8 por ciento más) que vendió Volkswagen en 2016 pese a los efectos del reciente escándalo de manipulación de emisiones de sus modelos diesel.
La última vez que Toyota quedó como segundo mayor vendedor anual del mundo fue en 2011, año en el que el terremoto y tsunami devastaron el noreste de Japón y afectaron gravemente sus operaciones al causar importantes cortes en las cadenas de suministro.
Toyota ya fue superado por Volkswagen como líder mundial de ventas en el primer semestre de 2016 y también en la primera mitad de 2015, aunque entonces la compañía japonesa acabó líder ya que el escándalo de emisiones del grupo alemán se destapó en septiembre de aquel mismo año y golpeó gravemente sus ventas del último trimestre.
Según indicó hoy en un comunicado la compañía japonesa, sus ventas se resintieron ligeramente en 2016 en Estados Unidos, su principal mercado, mientras que las de Volkswagen crecieron contundentemente (un 12,2 por ciento) el año pasado en otro ámbito muy importante, China.
Para todo 2017, Toyota ha dicho que quiere vender 10,2 millones de unidades en todo el mundo, superando así la marca de los 10 millones por cuarto año consecutivo.
En cuanto a producción, el gigante nipón del motor indicó que en 2016 ésta se redujo en Japón un 0,7 por ciento hasta 3,166 millones de unidades y que aumentó un 1,2 por ciento en el exterior hasta 5,807 millones.
En total, Toyota manufacturó el año pasado 8.973.000 de vehículos en todo el mundo, un 0,5 por ciento más que en 2015.