El príncipe Felipe, de 97 años, ha decidido dejar de manejar, menos de un mes después de que estuvo involucrado en un choque que dejó a dos mujeres heridas, dijo el Palacio de Buckingham el sábado.
El Palacio dijo que «después de considerarlo cuidadosamente», el esposo de la reina Isabel II «ha tomado la decisión de entregar voluntariamente su licencia de conducir”.
Felipe chocó su Land Rover contra otro auto el 17 de enero cerca de la mansión de la familia en Sandringham, en el oriente de Inglaterra. El auto volcó y Felipe salió de su auto con ayuda de otros pero no resultó herido. Dos mujeres que iban en el auto resultaron heridas, aunque no de gravedad, y un bebé de nueve meses tampoco resultó lesionado.
Felipe fue fotografiado manejando de nuevo dos días después pero sin cinturón. La policía dijo que le dieron unos «consejos adecuados» después de eso.