Tesla aumentó sus pérdidas netas a 2240 millones de dólares en 2017, un 189,7 % más que en 2016, tras perder 770 millones de dólares el último trimestre del año, pese a un incremento de los ingresos, informó hoy el fabricante de automóviles eléctricos de lujo.
El aumento de las pérdidas se produjo a pesar de que los ingresos de Tesla aumentaron un 67,9 %, hasta 11758 millones de dólares. Pero las pérdidas por operaciones ascendieron a 1632 millones de dólares, un 144,6 % más que en 2016.
Tesla informó en un comunicado de que «en algún momento en 2018 esperamos empezar a generar ingresos trimestrales operativos de forma sostenida».
La empresa explicó que prevé que, con el previsto incremento de la producción del Model 3 y de los productos de almacenaje de energía, el crecimiento de los ingresos en 2018 «excederá de forma significativa» el de 2017.
Tesla también pronosticó que para finales del primer trimestre de 2018 alcance unos niveles de producción del Model 3 de 2.500 unidades semanales y que para finales del segundo trimestre el ritmo de producción sea de 5.000 unidades semanales.
Pero la compañía advirtió de que en el pasado ha tenido problemas para cumplir sus expectativas de producción.
En el último trimestre del año, Tesla entregó 28.425 unidades de los Model S y Model X, y 1.542 del Model 3.
En el conjunto de 2017, Tesla entregó 103.181 vehículos: 101.417 unidades de los Model S y Model X, y 1.764 del Model 3.